c          o          m          p          a          ñ          e          r          a


Tus dedos sí que sabían peinarse como nadie lo hizo
mejor que los peluqueros expertos de los trasatlánticos
ah y tus sonrisas maravillosas sombrillas para el calor
tu que llevas prendido un cine en la mejilla

junto a tí mi deseo es un niño de leche

cuando tu me decías
la vida es derecha como un papel de cartas

y yo regaba la rosa de tu cabellera sobre tus hombros

por ello y por la magnolia de tu canto

que pena
la lluvia cae desigual como tu nombre





1925